“Lo que resume todo lo que estamos haciendo es: ser feliz y dar felicidad a otros”.
Preocupados por la escasez de herramientas especializadas para el tratamiento de Trastorno del Espectro Autista en el Perú; Larry Gamboa, Kevin Lazo y Josué Sánchez, egresados de la carrera de Ingeniería Mecatrónica, decidieron diseñar un robot que ayude a niñ@s con autismo en terapias del área de lenguaje.
Este proyecto tuvo una etapa de mejoramiento desarrollado en el Fab Lab de nuestra Universidad. El material fue completamente impreso en 3D. “El Fab Lab no sólo te da el espacio, sino también te brinda las herramientas que tú necesitas para realizar tu proyecto”, afirma Larry.
Siempre buscando el mejor resultado, no dudaron en trabajar con el asesoramiento de terapeutas especializados en el área, es así que perfeccionaron su creación añadiendo voz y movilidad al robot para que sea más interactivo con l@s niñ@s. Además, con un diseño innovador inspirado en el personaje de Baymax, lograron que el robot tenga una apariencia infantil y de ese modo consiguieron que l@s niñ@s se sientan más atraídos a trabajar con él.
Actualmente el robot ayuda a pequeños de sectores con escasos recursos, quienes van mostrando mejoras en las terapias de autismo leve. “Estar con los niños y las familias, me llevó a reflexionar en cómo puedes ofrecer tus conocimientos en bien de algo. Lo que resume todo lo que estamos haciendo es ser feliz y dar felicidad a otros. Vimos que lo niños con los que estamos trabajando están mejorando y recuerdo muy bien la sonrisa de una mamá que nos agradeció por ayudar a su hijo. ¡Cuando tú haces algo bien da gusto!”, menciona Kevin.
Con el espíritu entusiasta que los caracteriza, no quieren dejar de lado su labor y están proyectados en trabajar una próxima versión del robot, el cual pueda trabajar en más áreas de terapia, además están en la búsqueda de alianzas para que este prototipo pueda ser accesible a nivel nacional.
¿Cómo funciona?
El robot muestra una imagen y tiene dos opciones: la primera es señalar qué imagen está mostrando y que el niño repita lo que escucha y la otra es mostrar y preguntar al niño qué imagen observa así el pequeño empieza a interactuar con el robot. Este proceso debe ser guiado por un terapeuta ya que está diseñado a trabajar con niños desde un año y ocho meses hasta seis años.
Porque cada iniciativa de nuestros estudiantes nos llena de orgullo, felicitamos a nuestros ingenieros que tienen la visión de impactar en el país haciendo robótica social, orientada al autismo
bien por la comunidad continental , mas proyectos para el peru
Excelente idea, por favor, pónganse en contacto conmigo, me gustaría trabajar con ustedes en un nuevo proyecto. Jorge Flores 981423977