Heredó el talento de su padre y de él aprendió a trabajar cada día por los sueños que busca alcanzar. Leonardo Favio Rojas De la Cruz, más conocido como “Chupetito” es estudiante de nuestra carrera de Administración y Marketing del campus Huancayo. Recientemente, nos sorprendió y pudimos verlo caracterizado en nuestro campus, ya que debido a su trabajo y las obligaciones académicas, no dudó en ir disfrazado para cumplir con su deber como estudiante. Conoce más sobre él y esta divertida anécdota que llena de orgullo a nuestra Universidad.
El inicio de “Chupetito”
El arte llego a su vida desde que tenía memoria. Su padre, Willian Rojas Tovar, el recordado payasito “Chupetín”; solía llevarlo a los shows infantiles que tenía. “Me gustaba mucho acompañar a mi papá y estar en las celebraciones. Hasta que un día me castigó y no quiso llevarme a sus trabajos. Así que, para acompañarlo nuevamente, empecé a caracterizarme”, recuerda Leonardo.
Una anécdota divertida y el compromiso de un futuro administrador
Nuestro estudiante nos relata la divertida anécdota en nuestro campus. “Era el Día de la Juventud y ya había aceptado realizar un show en un colegio de Huancayo, pero el horario era muy cercano a mis clases. Así que para ahorrar tiempo decidí ir vestido y maquillado para no faltar ni con el trabajo, ni mis estudios”, menciona. El arte de crear sonrisas está en sus venas, así que decidió aprovechar la situación para hacer reír a más de uno en el campus. “Ingresé con mi DNI de cartón para alegrar a los de seguridad y volé a mis clases. La profesora se sorprendió mucho y mis compañeros empezaron a armar la “chacota”, recuerda.
Al finalizar el día, las fotos y videos de “Chupetito” empezaron a invadir las redes. “Felicitaciones. Este es un guerrero de verdad”, “Él sí es un ejemplo”, “Es un gran compañero y nos da alegría en el aula”; fueron algunos de los comentarios. “Yo alegre, porque sé que hay estudiantes que tienen padres vivos y les pagan la carrera. Pero también sé que hay personas que estudian y trabajan. Así que venir vestido para cumplir con mi trabajo y mi carrera me hizo sentir orgulloso. Sé que el esfuerzo que hago a diario, vale la pena”, resalta.
“Los payasos tienen un gran poder”
“Si trabajas con niños tienes que aportar con algo más que hacer reír. Yo quiero lograr que mi show sea educativo y se difunda más llevando el humor blanco. Ser payaso es una disciplina artística en la cual tienes que aprender constantemente, debes capacitarte para ofrecer un espectáculo de calidad. Por ello, viajo algunos talleres fuera de Huancayo para seguir aprendiendo y hacer lo que mi papá siempre quiso: llevar el circo a las casas”, comenta nuestro estudiante.
Su ejemplo y maestro
Su padre, “Chupetín”, es uno de los referentes de la comicidad en “La Incontrastable”, quien lamentablemente falleció durante la pandemia. Sin embargo, es recordado por su compromiso con las causas sociales y la creatividad con la que visibilizaba los problemas de la ciudad. “Recuerdo que en la pandemia mi papá se reinventó y empezó a vender frutas con su personaje. Yo estaba en la adolescencia y no quería volver a ser payaso hasta que él me lo pidió. Esa fue la última vez que me vio caracterizado”, menciona Leonardo, quien lleva con orgullo su trabajo artístico y sigue los pasos de su mentor.